Cómo enfrentarse a los rivales tranquilos/pasivos en un torneo de poker
Los jugadores de poker que quieren ir a ganar un torneo de poker deben saber cómo analizar a sus rivales para que puedan desarrollar una estrategia de juego eficaz. Uno de los estilos de juego que un jugador de poker puede tener es el tranquilo/pasivo.
El jugador tranquilo pasivo es un jugador de poker que juega muchas manos, pero sólo iguala apuestas o pasa durante la ronda. Puede ser molesto jugar contra este tipo de jugador por su constante estrategia de juego que no varía. Los rivales del jugador tranquilo/pasivo encontrarán dificultad en descifrar cómo son sus cartas ya que este jugador juega siempre todas las manos igual.
Una de las estrategias para saber más acerca del jugador de poker tranquilo/pasivo es forzarle a la acción. Si el jugador A tiene una mano de salida fuerte, entonces pueden intentar subir la apuesta. Esto forzará al jugador pasivo/tranquilo a retirarse o subir. Después del flop (las tres primeras cartas comunitarias), el jugador A puede seguir “intimidando” al jugador pasivo/tranquilo a algún tipo de acción, para que salga de su comodidad. Rara vez, este tipo de jugador se retirará del torneo o actuará como si estuviera fuera de sus cabales. Igualmente, el jugador tranquilo/pasivo probablemente no llegue a sobrevivir hasta la final del torneo.
Otra estrategia que parece muy difundida es cuando se juega contra un jugador tranquilo/pasivo que va bastante mal en el preflop y esperar a ver qué tipo de mano se puede hacer después del flop. Si un jugador puede hacer un mejor post-flop, es el que debería arriesgar. En este punto, el jugador tranquilo/pasivo ya ha invertido en el bote, y es ahora cuando un jugador con una mano decente puede atraer a una mayor apuesta del jugador tranquilo/pasivo. Sin embargo, el jugador debería ser cauteloso ya que este jugador podría tener una mano mejor.
El jugador original debería evaluar el valor de la mano contra otros post-flops posibles antes de arriesgar sus fichas, pero tampoco debería sobrevalorar la fuerza de la mano del jugador tranquilo/pasivo ya que este tipo de jugador suele jugar las manos de las que debería descartarse.
La estrategia final para jugar contra este tipo de jugador es reconocer al jugador tranquilo/pasivo. Al identificar a estos tipos de jugadores, un jugador regular de poker puede jugar de modo más agresivo cuando estos jugadores le igualan, teniendo así una buena oportunidad de bote. En ocasiones, el jugador tranquilo/pasivo tiene una mano más fuerte por suerte divina. Sin embargo, en la mayoría de los casos, no tendrán nada de valor en juego.
Al aprovecharse de las apuestas que ha igualado el jugador tranquilo/pasivo y al saber qué manos jugar, los jugadores regulares de poker pueden “robar” las fichas de este jugador en la mayoría de las manos, de ese modo, aumentar el total de fichas y mejorar las oportunidades de quedar bien posicionado en el torneo.